13.8.11

Y de repente encuentras a alguien que también toma el Cola – Cao con leche fría, que no se prueba la ropa en el probador de la tienda y que siempre aparca marcha atrás. Alguien que odia hacer la compra solo, que le encanta conducir con la música a todo volumen y que no le gusta pagar con monedas de dos euros. Alguien que se para con cualquier perro que se encuentra por la calle, que le pone nervioso el silencio de las bibliotecas y que se muerde los labios cuando miente. Alguien que pone a Sabina para empezar bien el día, que ve películas de Almodóvar por obligación y que aborrece la ensalada de pepino. Alguien que en el fondo siempre ha estado ahí.